A votación, la otra economía “verde”
Por José López Zamorano-La Red Hispana
En la recta final hacia las elecciones del 8 de noviembre, la temática de la economía verde, es decir, la creación de millones de empleos sustentables a partir de la Ley de Reducción Inflacionaria (IRA), es una de las principales banderas de los demócratas.
Menos visible, pero igualmente importante desde una perspectiva social, es el hecho de que en cinco estados del país, Arkansas, Maryland, Missouri, Dakota del Norte y Dakota del Sur, el uso de la marihuana recreativa será decidido en las boletas electorales. Se trata de la otra economía “verde” que también ocupa la atención de los votantes.
En Maryland, el estado donde yo resido, un sondeo del Washington Post y la Universidad de Maryland encontró que el 73% de los votantes registrados está a favor de la legalización de la marihuana con fines recreativos. Si consideramos que en el ambiente político actual existe un amplio nivel de polarización en una amplia gama de temas incluida el rumbo económico del país, la violencia por las armas de fuego, la reforma migratoria, el cambio climático, y el estado de los derechos reproductivos, se trata de un nivel de consenso significativo.
En este momento, la marihuana para fines recreativos es legal en 19 estados, la capital estadounidense Washington DC y la isla de Guam. Cada uno de los estados define las reglas del consumo y venta de la marihuana, pero en todos los casos los expendios requieren de una licencia oficial. Todas las ventas de marihuana generan cientos o miles de millones de dólares en impuestos.
El tema de la marihuana refleja la evolución del pensamiento social en los Estados Unidos durante las últimas décadas. Cada vez existe un mayor grado de tolerancia para la legalizar esta droga, de la misma forma que también ha aumentado la tolerancia y la aceptación de la igualdad de derechos para las personas del mismo sexo o, en sentido contrario, menos respaldo popular a la pena de muerte.
Es importante tener en cuenta que la marihuana continúa siendo ilegal a nivel federal, lo cual ha creado un espacio virtual de confrontación legal entre las decisiones de los estados que permiten su consumo con fines médicos y/o recreativos, con la postura inamovible del gobierno federal.
La inamovilidad de las leyes federales sobre el consumo médico o recreativo de la marihuana corre a contrapelo de la creciente inclinación de los votantes a permitir su uso con fines recreativos. Pero en los Estados que celebrarán su referéndum, hay variaciones notables. En Dakota del Sur por ejemplo, el apoyo a la marihuana con fines recreativos es de apenas el 43%. Algunos de los otros estados ni siquiera se han tomado la molestia de realizar encuestas.
Me parece apropiado que cada estado del país defina el curso de acción que debe seguir en cuanto al uso medicinal o recreativo de la marihuana, porque tanto sus partidarios como sus detractores tienen la oportunidad de presentar sus argumentos ante los votantes a fin de que tomen una decisión juiciosa, bien informada y acorde con sus propios valores y creencias.