Sistema frontal en Chile: el Gobierno anuncia la suspensión total de clases para las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana y O’Higgins
El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, detalló que el fenómeno climático supone “un riesgo para la vida de las personas”
Por: MARÍA VICTORIA AGOUBORDE-El Pais
El Gobierno de Chile anunció la suspensión total de clases este jueves y viernes para las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana de Santiago y O’Higgins. La medida afectará a jardines infantiles y a establecimientos de educación básica y media, incluyendo a sostenedores públicos y privados. A los centros de educación superior, que tienen autonomía en esta materia, también se les recomendó suspender sus clases. “Estamos garantizando, para la tranquilidad de los sostenedores, de que esta suspensión de clases sea sin pérdida de la subvención y sin la obligación de la recuperación de clases si es que no tienen espacio para la recuperación”, explicó la tarde de este miércoles el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve.
Las autoridades también emitieron una alarma meteorológica para este jueves que afectará a esas cuatro regiones. La Dirección Meteorológica de Chile (DMC) emite una alarma cuando se pronostican fenómenos meteorológicos con un grado de severidad intensa, con alto potencial de generar riesgos materiales y de vida en las personas.
Los pronósticos anuncian una caída de entre 60 y 80 milímetros de agua en menos de un día en Santiago de Chile y los expertos dicen que se puede tratar del episodio más importante de precipitaciones desde 1982. Monsalve enfatizó que el sistema frontal supone “un riesgo para la vida de las personas” y llamó a los ciudadanos a resguardarse en sus casas.
El Gobierno ya había anunciado la suspensión total de clases en la región del Biobío desde este miércoles hasta el viernes y también decretó zona de catástrofe. Esta región, ubicada 450 kilómetros al sur de Santiago, ha sido la más afectada por las precipitaciones que azotan el territorio desde principios de esta semana.
Según el último balance entregado la tarde de este miércoles por la directora del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), Alicia Cebrián, solamente en la región del Biobío hay 480 personas damnificadas y 1.264 viviendas con daño menor, de las cuales 633 se encuentran en evaluación. Monsalve también informó que el sistema frontal seguirá afectando este territorio e implicará “una caída de precipitaciones intensas en periodos cortos de tiempo. Estamos hablando de caída de 60 a 80 milímetros en menos de 24 horas. En algunos lugares puede superar por lejos esa cifra. Por ejemplo, Curanilahue tiene acumulada solo esta semana la caída de 215 milímetros de precipitaciones”.
Hasta ahora las situaciones más complejas se han detectado en las zonas cercanas a cursos de aguas. Senapred declaró alerta roja por peligro de desborde para las provincias de Arauco y Concepción. Las precipitaciones han causado estragos, como el desborde del río Pichilo, el río Andalién, el estero Bellavista y el río Lía.
El frente de mal tiempo ha afectado desde la región del Maule hasta la región de La Araucanía. En esta última, el delegado presidencial regional, José Montalva, informó que hasta la mañana de este martes había 14 viviendas con daños en la localidad de Loncoche por las lluvias que dejaron entre 50 y 90 milímetros de agua en menos de 24 horas.
Este miércoles, desde Alemania, el presidente Gabriel Boric se refirió a la situación que afecta a gran parte de Chile: “Estamos ante lluvias muy fuertes, hemos tenido algunos desbordes de ríos. Este sistema frontal va a seguir golpeando nuestro país, en particular va a ir avanzando hacia el norte. Decidimos decretar estado de catástrofe anticipándonos porque acá todos los recursos del Estado tienen que estar disponibles para ayudar a todos los que necesiten”, dijo desde la cancillería estatal en Baviera.
El mandatario además enfatizó en la importancia de tomar medidas de precaución: “Hago un llamado muy explícito a las personas a atender los llamados de evacuación y las alertas del SAE (Sistema de Alerta de Emergencias), a la responsabilidad de que no tengamos víctimas fatales, de que la afectación sean las menores posibles es compartida. Desde el Estado tenemos que cumplir nuestro rol, pero es importante también que las familias, las personas que reciban alertas, cumplan con las instrucciones de las autoridades. Esto es clave a la hora de salvar vidas. Como Gobierno, independiente de donde estemos, seguimos monitoreando y atentos a nuevas medidas que se requieran en las zonas afectadas”.
