Detenido un hombre con un arma «compatible» con la del asesinato del consejero delegado de UnitedHealthcare, según la policía 

Detenido un hombre con un arma «compatible» con la del asesinato del consejero delegado de UnitedHealthcare, según la policía 

Associated Press y MPR News Staff 

Un hombre con un arma que se cree que es similar a la utilizada en el asesinato del director ejecutivo de UnitedHealthcare, Brian Thompson, fue puesto bajo custodia policial el lunes para ser interrogado en Pensilvania, dijo un oficial de la ley a The Associated Press. 

La policía detuvo al hombre después de recibir una pista de que había sido visto en un McDonald’s cerca de Altoona, Pensilvania, a unos 233 kilómetros al oeste de la ciudad de Nueva York, dijo el funcionario, que no estaba autorizado a discutir detalles de la investigación y habló con la AP bajo condición de anonimato. 

El hombre que está siendo interrogado en relación con el asesinato es Luigi Mangione, de 26 años, dijo la comisionada de policía de Nueva York, Jessica Tisch, en una conferencia de prensa el lunes por la tarde. 

«Se cree que es nuestra persona de interés en el asesinato descarado y selectivo de Brian Thompson», dijo Tisch. 

Junto con el arma, la policía encontró un silenciador, documentos de identidad falsos y escritos que parecían criticar al sector de los seguros médicos, según la responsable policial. 

La policía de Nueva York está enviando detectives a Pensilvania para interrogar a la persona detenida. Se espera que el alcalde de Nueva York, Eric Adams, se refiera a este suceso en una rueda de prensa programada previamente por la tarde en Manhattan. 

Thompson, de 50 años, fue asesinado el pasado miércoles en lo que, según la policía, fue un ataque «descarado y selectivo» cuando se dirigía solo al Hilton desde un hotel cercano, donde la empresa matriz de UnitedHealthcare, UnitedHealth Group, celebraba su conferencia anual de inversores, según la policía. 

El tirador pareció estar «al acecho durante varios minutos» antes de acercarse al ejecutivo por la espalda y abrir fuego, dijo la comisaria de la Policía de Nueva York, Jessica Tisch. Utilizó una pistola de 9 mm que, según la policía, se asemejaba a las pistolas que utilizan los granjeros para sacrificar animales sin hacer mucho ruido. 

En los días transcurridos desde el tiroteo, la policía pidió ayuda al público publicando una colección de fotos y vídeos, incluidas imágenes del ataque, así como imágenes del sospechoso en un Starbucks antes del tiroteo. 

Fotos tomadas en el vestíbulo de un hostal del Upper West Side de Manhattan mostraban al sospechoso sonriendo tras quitarse la máscara, según la policía. 

Los investigadores han sugerido que el pistolero podría haber sido un empleado o cliente descontento de la aseguradora. 

La munición encontrada cerca del cuerpo de Thompson llevaba las palabras «delay» (retrasar), «deny» (negar) y «depose» (deponer), imitando una frase utilizada por los críticos del sector de los seguros. 

El pistolero ocultó su identidad con una máscara durante el tiroteo, pero dejó un rastro de pruebas, como una mochila que abandonó en Central Park, un teléfono móvil encontrado en una plaza peatonal y una botella de agua y un envoltorio de barrita de proteínas que, según la policía, compró en Starbucks minutos antes del ataque. 

La noticia del lunes se produjo cuando los perros y los buzos volvieron a Central Park, en Nueva York, mientras se prolongaba por sexto día la búsqueda del asesino de Thompson. 

Los investigadores llevan rastreando el parque desde el tiroteo del miércoles y llevan tres días buscando en al menos uno de sus estanques. 

El viernes, la policía encontró la mochila que, según dicen, el asesino tiró al huir de la escena del crimen a una estación de autobuses del centro de la ciudad, de donde creen que salió en un autobús. 

Siguiendo los pasos del pistolero mediante vídeos de vigilancia, los investigadores afirman que el tirador huyó a Central Park en bicicleta, salió del parque sin la mochila y se deshizo de la bicicleta. 

Luego caminó un par de manzanas y se subió a un taxi, llegando a la estación de autobuses del puente George Washington, que está cerca del extremo norte de Manhattan y ofrece servicio de cercanías a Nueva Jersey y rutas de Greyhound a Filadelfia, Boston y Washington, dijo el jefe de detectives de la policía de Nueva York, Joseph Kenny. 

El FBI anunció a última hora del viernes que ofrecía una recompensa de 50.000 dólares por información que condujera a una detención y condena, que se suma a una recompensa de hasta 10.000 dólares que ha ofrecido la policía de Nueva York. La policía cree que el sospechoso actuó solo. 

A última hora del sábado, la policía difundió dos fotos más del sospechoso que parecían proceder de una cámara instalada en el interior de un taxi. En la primera se le ve fuera del vehículo y en la segunda, mirando a través del tabique entre el asiento trasero y la parte delantera del taxi. En ambas, su rostro está parcialmente oculto por una máscara azul. 

Durante el registro del parque, la policía de Nueva York ha tomado medidas para minimizar las molestias a los visitantes, lo que ha dado lugar a una extraña yuxtaposición de corredores, turistas y una escena del crimen activa. 

El lunes, una pequeña parte del parque fue acordonada con cinta policial azul y blanca para que los buzos que buscaban en un estanque pudieran cambiarse y meterse en el agua. Unidades caninas olfatearon las jardineras cubiertas de hojas entre los senderos. 

En un momento dado, un grupo de unos 30 turistas francófonos siguieron a un guía por un sendero, pero no pudieron avanzar más debido a la cinta policial. Antes de dar media vuelta, muchos de ellos sacaron sus teléfonos para fotografiar a los buzos. 

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